lunes, 7 de junio de 2010

Tears and Beauty

¿Qué tendrán las lágrimas, que después de pasarnos minutos, horas, llorando, acabamos teniendo una cara preciosa? Después de bajarse la consiguiente hinchazón ocular, aparecemos con una piel perfecta, iluminada, con un rostro diferente que sorprende. 
Estoy segura de que este hecho tiene una explicación científica: eliminamos estrés, liberamos una enzima terminada en -ina, o cualquier proceso similar. Yo quiero creer que tiene que ver con que nos liberamos emocionalmente, aunque el sentimiento que disparó las lágrimas siga presente, latente en nuestro interior, atenazando nuestro corazón y amenazando con volver a abrir la presa de las lágrimas.
He comprobado este hecho en un par de ocasiones. Una vez conmigo misma, y la otra recientemente con una amiga. En ambos casos, después de un día de llantina incontrolable, disfrutamos de una noche maravillosa en la que resplandecimos como cualquier sol de cualquier galaxia. Y nadie supo del oculto dolor, pero apreció la belleza interior, reflejada en nuestro límpido rostro.

1 comentario:

  1. Porque.... yo creo que porque una vez que lo sueltas todo y ya no queda nada mas en ti.... es cuando puedes estar tranquila.... eso si.... hasta la siguiente vez.

    ResponderEliminar